De vez en cuando, viendo una película que de entrada no tiene nada de especial, sucede que brilla una frase, unas palabras que te hacen pensar o emocionarte. Así me sucedió ayer. En la película "el río de la vida", al final, el protagonista, ya anciano reflexiona sobre la vida y dice esta hermosa frase: "amar completamente a quien no comprendes completamente". Anduve "paladeando" la frase un buen rato. La película presenta la vida de dos hermanos muy diferentes, el mayor con una vocación intelectual, más responsable, el pequeño un ser alocado que termina arruinando su vida y muriendo a causa del juego. El mayor tachado de aburrido por todos, el pequeño simpático y atractivo a ojos de todos. Ambos hijos de un pastor protestante. La misma educación, derivas vitales diferentes.
A lo largo de la película el hijo mayor hace continuos esfuerzos por comprender a su hermano, por acogerle. Le quiere y eso es lo único que le importa, aunque le duelan muchos de sus comportamientos.
El amor es un dinamismo, una fuerza interior que nos lleva a territorios más allá de la lógica, es aquello de que "el corazón tiene razones que la razón no entiende". No es que el amor sea ilógico,sino que tiene su propia lógica, sus propias "leyes" que trascienden toda ley.
Sí, se puede amar a quien no se comprende precisamente porque sólo se comprende lo que se ama. El verdadero amor ama por razón de amor, no por razones lógicas o retributivas o economicistas o en función de estándares de perfección. Se ama porque se ama y ese amor capacita para descubrir la belleza de lo amado.
Se puede amar completamente a quien y lo que no se entiende completamente. Será el amor quien nos descubra profundidades, caminos y comprensiones imposibles para quien no ama.
2 comentarios:
Gracias por su comprension
Completamente de acuerdo
Publicar un comentario