La Vida se manifiesta en nuestras vidas siempre y cuando mantengamos abiertos los caminos del interior. El actual ritmo de vida y los requerimientos de nuestra sociedad dificultan cada vez más ese acceso al interior personal en el que se encuentran las materias primas para la construcción de nuestras vidas. Sin darnos cuenta, nos autoexiliamos de nuestro hogar interior. Allí, utilizando la imagen del Maestro Eckhart, Dios se encuentra como en su casa, pero nosotros nos sentimos extranjeros.

Educar la Interioridad es favorecer los procesos y proporcionar las herramientas que nos permitan volver a casa, al hogar interior para desde allí vivir unidos a los demás, al mundo, a Dios.

lunes, 3 de octubre de 2011

Pasión divina

Mirad esto que acontece: un diminuto gorrioncillo
aleteando en medio de un inmenso cielo
con el océano entero bramando bajo él.

Entre cielo y océano
se estremece y tiembla
el avecilla
fascinada, agotada, atraida.

¡Huye!... Huye mientras puedas,
recupera la ruta hacia
la tierra segura,
¡Huye!... Huye mientras puedas.

Corazón trémulo de contemplación
un chorro de sangre y vida
empuja al avecilla 
hacia el oceánico centro.

¡Huye!... No te adentres más,
un chorro de luz y sal
genera corriente de aire
que empuja el vuelo más adentro.

Sobre el mar impetuoso, incandescente
de tu pasión divina
aletea este alma, diminuta,
frágil avecilla.

Mis pequeños ojos
atisban temerosos
los remolinos de tu Ser,
tu oceánica inmensidad.

Tu vida en explosión de olas
amenaza con empapar
este cuerpo
que ya desmaya ante tu visión.

¿Cómo llegué aquí?
¿Qué fuerza hizo levantar 
de mi alma el vuelo?
Estoy aquí, ese es el hecho.

Aquí estoy y sobrevuelo
tu mar hondo, bravo,
ancho, terrible
y atrayente.

¡Huye!... ¡No te adentres más!
Ya no distinguen los ojos
contornos de tierra
ya sólo hay cielo y mar,

¡Huye!... ¡Te perderás!
Perdido está sin remedio
sólo puede el avecilla aletear
mientra es engullida por el mar.
Ya no hay cielo,
sólo mar, todo mar,
sólo océano, sólo inmensidad.
Impetuoso... incandescente pasión divina.

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